Como señales que apuntan en el sentido correcto, calificó el presidente de Fedeleche, Dieter Konow, las recientes alzas en los precios de la leche fresca anunciadas por dos de las principales industrias lácteas que operan en nuestro país. Sin embargo, el dirigente cuestionó la forma y el momento en que han entrado en vigencia estas modificaciones en las ofertas de compra de ambas empresas.
El dirigente reconoció que tras estos anuncios hay una coyuntura internacional que ha incidido para mejorar las expectativas generales del negocio, “el problema es que el escenario de mediados de diciembre no era distinto al de comienzos de mes y por lo tanto no nos parece razonable que las nuevas pautas recién entren en vigencia a mitad del mes”.
Considerando que los proveedores nacionales aún no se recuperan de la peor crisis que los ha afectado en los últimos treinta años, y que como contrapartida estas empresas que lideran el mercado nacional han reconocido públicamente que sus resultados esta temporada serán positivos, incluso más allá de sus expectativas, Konow aseguró que lo esperable era una señal potente y oportuna en sus nuevas ofertas de compra.
“Creemos que aquí no ha existido una lectura adecuada del mercado y de la realidad que enfrentan los productores y eso de alguna manera enturbia una señal que podría haber sido tremendamente positiva”, sostuvo el dirigente.
Sin perjuicio de lo anterior, el presidente de Fedeleche, valoró la actitud de Nestlé en cuanto a aplicar su incremento de $13/litro en forma automática a todos sus proveedores, a diferencia de lo hecho por Soprole, cuyo incremento total (en torno a los $15/litro) sólo será accesible para un porcentaje minoritario de sus proveedores, en circunstancias que la mayoría sólo recibirá en forma inmediata poco más de la mitad del beneficio.
“Sólo lamentamos, agregó Konow, que Nestlé no haya asumido un liderazgo acorde a lo que representa la compañía en el mercado nacional y mundial y tenga que haber esperado el anuncio de Soprole para dar una señal como ésta a sus proveedores. En el caso de Soprole, nos preocupa que haya vulnerado un compromiso que suscribimos hace seis años (Acuerdo de Punta de Tralca), en el sentido que todos los cambios de precio que obedecieran a factores coyunturales –como ocurre en el escenario actual – serían aplicados a través del precio base y no se mezclarían con los cambios en los bonos específicos que apuntan a señales de mediano y largo plazo, como son los aspectos de sanidad animal y componentes sólidos de la leche”.
“Adicionalmente, sostuvo Dieter Konow, Soprole ha introducido de manera inédita una diferenciación de precios dentro en la principal zona lechera del país (regiones de Los Ríos y de Los Lagos), que no ha sido debidamente justificada y que ha acentuado las suspicacias en torno al origen de la medida”.
No obstante las aprensiones del dirigente frente a estos anuncios de incremento en los precios de la leche, señaló que esta coyuntura ha servido para reponer en la mesa de trabajo sectorial público-privada, el debate en torno a la necesidad de perfeccionar tanto la metodología para determinar los precios pagados a los productores por la leche, como la estructura que debieran tener las pautas que fijan las diferentes industrias para asignarle valor a cada parámetro que conforma el precio final del producto.
“Hoy más que nunca, concluyó el presidente de Fedeleche, se hace necesario contar con pautas que sean homologables entre sí, de comprensión simple para todos los productores y comparables para que cada proveedor pueda tomar la mejor decisión al momento de escoger la planta donde venderá su leche, cosa que hoy resulta tremendamente compleja”.
Colaboraciones |
![]() |
Canales |
Agricultura![]() |
Ganadería![]() |
Alimentación![]() |